¿Es la participación util?

Vicálvaro grupos 7

Este artículo es una reflexión personal sobre la participación. Es un conjunto de pensamientos personales que surgen desde el trabajo diario como dinamizador del Foro Local de Vicálvaro, de mis experiencias pasadas en temas de participación y de las conversaciones que he tenido con personas que trabajan o estudian el tema y de sabias palabras leídas en artículos, libros o escuchadas en formaciones o grupos de trabajo. Todas las reflexiones surgen de una única pregunta. ¿Porque muchas personas consideramos importante la participación? ¿Porque creemos que es útil?

Primeramente quiero especificar que, en este artículo, no considero el término participación sólo entendiéndola como participación ciudadana. Considero participación todas aquellas situaciones en ámbito público, privado, o comunitario en las cuales un conjunto de personas deciden proponer, crear, decidir, ejecutar o evaluar proyectos, e ideas de forma comunitaria, todas juntas, sin delegar el poder en solo una o pocas personas. Tampoco quiero reflexionar mucho sobre el significado de participación. Hay muchas reflexiones a tal propósito. Por ejemplo se habla de diferentes niveles de participación en la escalera de participación elaborada por Sherry Arnstein. Aquí considero participación todo lo que ocurre desde el eslabón participativo de la propuesta, es decir un nivel de participación en el que la comunidad llega a tener un rol activo y propositivo en su entorno y es tenida en cuenta verdaderamente como sujeto de cambio.

escalera-participacic3b3n-r-hart1

 

Primeramente, la participación es un medio, no es un fin. La participación es un forma alternativa para promover un cambio en un entorno sea eso un barrio, una empresa, una cooperativa o un Estado. Básicamente se trata de delegar el poder de incidencia de un entorno en más personas, y hacerlas responsables y participes del proceso de decisión y ejecución. Y no es una idea novedosa, hay muchos ejemplos de culturas, cooperativas y comunidades que han funcionado o funcionan de forma participativa. Incluso antes de la llegada de la consolidación de la propiedad privada que empieza en Europa, en el siglo XVII, las zonas rurales se gestionaban de forma comunitaria y participativa (los comunes). Pero, ahora en España hay ayuntamientos, cooperativas y empresas de economía social y solidaria que están promocionando la participación como herramienta de cambio. Entonces una pregunta surge espontanea ¿Por qué?

¿Porque, en el caso de los ayuntamientos, no seguir funcionando simplemente como democracia representativa donde los representantes elegidos gobiernan para la ciudadanía, sin que esta sea participe del proceso de decisión? ¿Y porque, en el caso de las cooperativas de economía social y solidaria no seguir con un modelo piramidal y jerárquico proprio de las grandes empresas en vez de incluir a las socias en la toma de decisiones? Al fin y al cabo también así se pueden tomar decisiones y construir agendas que promuevan un cambio positivo en el mundo. ¿Por qué cambiar la forma de hacer las cosas y no sólo las cosas que se quieren hacer? ¿Qué tiene la participación de atractivo? ¿Es solo una moda o algo útil a un proceso de cambio?

Creo que las respuestas a estas preguntas puedan ser numerosas y con muchos matices muy validos. Intentaré recoger y sintetizar las opiniones de personas que le han dado muchas más vueltas sobre el tema que yo y algunas reflexiones personales.

comunidad

En primer lugar creo que el “como hacer las cosas”, en este caso de forma participativa o no, es muy importante porque, como ha afirmado Einstein “No podemos resolver problemas pensando de la misma manera que cuando los creamos”. Es decir, frente a la crisis económica, social y ambiental de los últimos años necesitamos ideas, soluciones y proyectos que surjan de un lugar diferente. Que no sean proyectos que nazcan en las oficinas de los técnicos y de los políticos, sino ideas elaboradas en cooperación con organizaciones de la sociedad civil, ciudadanas y ciudadanos, empresas etc. Además, años de corrupción e ineptitud de parte de la clase política y de fraudes y robos por parte de muchas empresas privadas han justamente hecho emerger la necesidad de un cambio, a través de la reapropiación del poder de decisión. En segundo lugar, cuando las personas se apropian de los proyectos de su comunidad, estos tienen mucha más probabilidad que sean exitosos y sostenibles a largo plazo. La apropiación es un concepto que “robo” al sector de la cooperación internacional. En la declaración de París de 2005 en el cual se definieron las estrategias necesarias para que la cooperación internacional fuera eficaz, la apropiación fue considerada uno de los pilares necesarios para que los proyectos y las políticas de ayuda fueran exitosos. Por ejemplo, aterrizar en un lugar extranjero y hacer un pozo de agua (típico de cierta forma de trabajar occidental) sin involucrar a la comunidad  hará que muy probablemente el proyecto sea un fracaso o que a largo plazo nadie se ocupe de ello. Esto porqué no hemos preguntado, escuchado, y co-decidido con las personas que finalmente utilizarán el proyecto. La comunidad lo percibirá como algo llegado desde fuera, un regalo que no habían pedido y que quizás no querían y es muy probable que nadie al final se ocupe de su manutención y su cuidado. Un verdadero proceso participativo haría que las personas se sientan escuchadas y tomadas en cuenta a la hora de programar una intervención en su comunidad y cuando esta se lleve a cabo es mucho más probable que haya mayor atención en el éxito del proyecto ya que las personas involucradas habrán puesto interés, esfuerzo y creatividad en su construcción. Finalmente, creo que la participación satisface diferentes necesidades humanas. Cuando la participación funciona y es eficaz, nos sentimos parte de una comunidad, nuestro sentido de pertenencia crece y nos sentimos más llenos y útiles. Nos sentimos escuchados, proactivos y parte de un grupo. Estamos contribuyendo a mejorar nuestro entorno y al mismo tiempo estamos construyendo comunidad. De hecho, creo que la principal fuerza de los procesos  participativos reside en estos dos aspectos. Es una herramienta para cambiar nuestro entorno y al mismo tiempo una herramienta para construir comunidad, que, a mi forma de ver, es un aspecto primordial para el bienestar de los seres humanos. Al fin y al cabo somos un animal social y en las relaciones personales se halla gran parte de nuestro bienestar psicológico.

Por lo tanto, creo que la participación, si bien construida, es una forma muy poderosa eficaz y positiva de cambio porque puede crear respuestas innovadoras a problemas locales y globales, responsabiliza a las personas sobre los proyectos y los procesos que se llevan a cabo en su comunidad y finalmente crea y estrecha lazos entre las personas, llegando a ser una herramienta de construcción comunitaria y bienestar personal.

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Imagen de Twitter

Estás comentando usando tu cuenta de Twitter. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s